Benedicto XVI. Oremos por su alma y aprendamos

Nuestra vida no existe por casualidad, no es casualidad. Dios ha querido mi vida desde la eternidad. Soy amado, soy necesario. Dios tiene un proyecto para mí en la totalidad de la historia; tiene un proyecto precisamente para mí. Mi vida es importante y también necesaria (Discurso 25/3/10) #

0 comentarios:

Publicar un comentario